Descripción

Verdadera joya de la arquitectura gótica civil. Probablemente el más bello palacio episcopal catalán. Tiene una entrada por la calle Croera, donde la fachada oeste daba directamente al río hasta la obertura de la calle Felip Pedrell. Este frontón fluvial ha conservado bien vivos los vestigios de su pasado. El Palacio Episcopal se situa delante de la fachada de la Catedral. La puerta se abre a un acceso de arcadas apuntadas y salones a los lados de factura sencilla y severa.

El patio es un modelo perfecto de gótico catalán. De planta irregular, este patio organiza el edificio. Presenta una amplia escalera flotante hasta el piso segundo donde se conservan dos galerías formadas por arcos ojivales sobre estilizadas columnas quadrilobuladas y bellos capiteles con decoración vegetal.

La capilla fue construida a principios del siglo XIV por orden del obispo Berenguer de Prats. Es de planta cuadrada y resuelve la cubierta del ábside con una vuelta de media estrella que descansa sobre pequeñas vueltas rinconeras o trompas angulares. Los ventanales de la parte superior son simulados y en ellos se puede apreciar su policromía original. La fachada interior de la capilla presenta un imponente trabajo escultórico de una riqueza extraordinaria: la Mare de Déu amb el Nen presidiendo el tímpano está flanqueada por pequeños ángeles y esculturas en las columnas que representan a santos padres y obispos.